Al llegar en la entrada te recibe esta curiosa campana en la que te piden que la hagas sonar para abrirte la puerta.

En el interior del molino se encuentran los molinos que muelen el maíz, el agua baja por un canal y los hace girar.


Por donde lo veas tiene hermosos detalles decorativos. Estos hacían que cada espacio tenga un encanto especial.











Detalle tras detalle, más haya de ser una construcción útil, su belleza me recordó el por qué amo hacer lo que hago, pues este es un buen ejemplo de utilidad y diseño.
