Mi patria, este mes de Julio se viste de fiesta.
No quiero escribir de su comida y cultura, pues ya sabemos que es increíble.
Amo cada uno de sus hermosos lugares. La madre naturaleza la diseño a la perfección y no podría decir cuál es mi lugar favorito, por donde la vea, es hermosa.
Costa

Sierra






Selva










No me alcanzan las palabras para describir toda la belleza que tiene, cada detalle perfectamente se mezcla entre sí alcanzando un equilibrio perfecto. Esto es lo que debemos buscar también en nuestra casa.
Una casa en equilibrio nos da esa fuerza y seguridad para recargarnos cada día.
Siempre he dicho que la naturaleza logra diseñar lugares inimaginables, logrando inspirar en cada persona una serie de sensaciones diferentes. En mi caso me muestra la más amplia y perfecta gama de colores y texturas, que puedo aplicar a cualquier ambiente.
Por ejemplo el color turquesa del cielo aplicado a los cojines y detalles decorativos, como velas combinan perfectamente con un sofá blanco como las nubes. Esta propuesta podría aplicarse a una casa de playa o para una sala con mucha iluminación.
El color verde del musgo de las piedras aplicado a un sofá combina con cojines amarillos y naranjas como las tonalidades del cielo en un atardecer. Y para enmarcar el espacio y resaltar los muebles una hermosa alfombra de pelo alto color arena, esta mezcla es tal vez para personas a las que les gusta el color.

Quiero agradecer a los fotógrafos Christian Oses, Frank Díaz, Patricia Castañeda por haber compartido su trabajo conmigo y así poderle dar vida a este post.
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